
En concreto, la compañía ha diseñado tres aparatos que
ofrecen distintos tipos de prestaciones y tienen como finalidad ahorrar tiempo
y molestias en determinadas visitas médicas.
El primero de ellos es ScanaFlo, un dispositivo que sirve
para analizar la orina. El segundo, llamado ScanaFlu, se utiliza para analizar
la saliva y determinar si la persona padece gripe. Por último, Scout, permite
controlar varios parámetros de las constantes vitales como tensión arterial,
nivel de oxigeno en sangre, pulso, cardiograma y temperatura.
Estos dispositivos comparten información con el médico con la
finalidad de evitar visitas a la consulta si no es necesario. El caso de Scout
es el más interesante porque está orientado a enfermos crónicos y les permite
llevar un control de la enfermedad más cómodo. Aunque los tres dispositivos se
encuentran todavía en fase de desarrollo, Scout es el más avanzado y se
comercializará próximamente con un precio en torno a los 150 dólares.